Jaime, 7 de junio de 2005, 12:17:18 CEST

Apurando, que es gerundio


Hace ya un buen puñado de años, los fabricantes de cuchillas de afeitar sacaron máquinas desechables con dos cuchillas, en un intento por apurar más el afeitado. No tardaron mucho en perfeccionar aún más este sistema, haciéndolo por la vía fácil: simplemente añadieron una tercera cuchilla. La ciencia avanza que es una barbaridad, pero las cuchillas de afeitar, no tanto. Parecía que la cosa se iba a acabar ahí; al fin y al cabo, no tiene mucho sentido ir añadiendo cuchillas y cuchillas. Lo mejor para quien aún no pudiera obtener un afeitado decente ya sería optar por la depilación láser o por una segadora. Pero no. Aún no se había alcanzado el límite: desde hace poco se puede comprar una máquina con cuatro navajitas. Y otra con tres que va a pilas, que ya es directamente absurda. No he probado la de cuatro, pero en este caso temo que el apurado pueda resultar excesivo. Es decir, no es bueno que se vea hueso cuando pasas la maquinilla. Es que no sólo te puedes cortar usándola, sino que de hecho podrías morir desangrado. Imagino que está desaconsejado su uso en caso de que uno esté solo en casa y no pueda pedir auxilio. Ahora, más peligroso resulta el modelo en el que están trabajando varios fabricantes. Aunque sí que es cierto que esta máquina proporciona un apurado casi perfecto y se puede decir que definitivo: en principio y salvo defectos de fabricación no sería necesario volver a afeitarse. Nunca. Adjunto el diseño de uno de los prototipos, conseguido gracias a un amiguete que conoce a gente que a su vez conoce a más gente.

Estos franceses... Les das algo que corte y mira lo que inventan
 
Menéame Envía esta historia a del.icio.us